¿Sabes eso de cuando estás en el colegio y te daban la oportunidad de recuperar un examen que habías suspendido? Pues algo así es lo que viene siendo una 'doble oportunidad' en apuestas. No se trata de aprobar el curso con las mejores notas, pero sí es un truquito que te puede salvar el pellejo.
La doble oportunidad, como su nombre bien indica, te permite cubrir dos resultados posibles dentro de una misma apuesta. Imaginemos que estamos viendo a nuestro velocista favorito competiendo: Puedes apostar a que gana o empata (vaya lío sería un empate en atletismo, pero sigamos la corriente), o tal vez prefieres irte por la opción de pierde o empata.
Esta estrategia hace tus opciones mucho más flexibles porque no pones todos los huevos en la misma canasta. claro, al tener más margen para acertar también hay menos ganancias; después de todo, esto no son trucos mágicos.
Pero oye, muchas veces va mejor asegurar al menos un cachito del pastel antes que arriesgarlo todo al aire.
La doble oportunidad en apuestas es como tener un comodín, similar a cuando en el cole te daban una segunda chance para recuperar un examen. Te permite cubrir dos resultados posibles en una misma jugada y, aunque de esta manera ganas menos si aciertas, la idea es asegurar un mínimo de acierto en lugar de apostar todo a un solo resultado.
Por ejemplo, imagina que apostamos al partido de tu equipo favorito. En lugar de arriesgar todo a que gane, podrías apostar a que gana o empata.
Esto te permite tener una mayor probabilidad de éxito, ya que cubres más escenarios. Es una especie de 'truco del colegial' que, aunque no te hará millonario de un tirón, sí puede salvarte en momentos en los que no quieres perderlo todo.
Yo mismo, entre mis apuestas en Euromillones y Primitiva, he notado que esta opción puede ser muy útil cuando se busca minimizar riesgos, de la misma forma que cuando aseguramos al menos un pase de examen.
La doble oportunidad es una estrategia para diversificar el riesgo, permitiéndote estar un paso más cerca de ganar algo, aunque sea pequeño.
Me parece una opción ideal para aquellos que prefieren ser prudentes y asegurar un 'cachito del pastel', en lugar de arriesgarlo todo.